jueves, 23 de septiembre de 2010

José Antonio Sánchez Araujo: "La voz del fútbol sevillano"

Sincero, natural y obviando cualquier diferencia con sus compañeros de profesión. Así se muestra el periodista que más partidos de fútbol ha radiado en España. Por Fco. Javier Baños. Fotografía de Fco. Javier Baños


Con estilo propio y una narrativa radiofónica que sólo él sabe hacer: la “Narrativa Araujo” como la bautizó Carlos Vergara, o la “Fonética Araujo” como le gusta llamarla a Antonio Burgos.

Jose Antonio Sánchez Araujo (Alcalá de Guadaíra, Sevilla, 1945) ha sido durante más de 40 años la voz del fútbol sevillano, comenzando en el mundillo por hobby en una emisora pequeña, como no, de su Alcalá de Guadaíra, sintiéndose atraído por la radio gracias a la dupla de su pasión por el fútbol y la afición por el medio radiofónico, donde escuchaba a Matías Prats y a Mariñas, y como él mismo dice “tanto pasar por la puerta de la radio hasta que un día entré y ya me quedé en la profesión ”. Ha simultaneado el trabajo en radio y prensa, huyendo de la televisión, para lo que esgrime un leve argumento: “será que la cámara no se enamora de mí”, pese a ello también ha colaborado en diversos programas televisivos de nuestra tierra, pero dedicándose siempre en cualquiera de los medios a la crónica y la información relacionada con el mundo del deporte.

Antes de su retirada el último partido que radió fue la final del Trofeo Carranza entre el Sevilla Fútbol Club y el Deportivo de La Coruña el pasado 15 de agosto, desde entonces, única y exclusivamente ha asistido a un partido de fútbol, al Sevilla Fútbol Club - Stuttgart de Champions League, partido en el que colaboró junto a Paco Gamero y Pablo Alfaro en la retransmisión en directo para Canal Sur Televisión. Pese a estar jubilado se sincera y declara que le gustaría retransmitir un partido del Sevilla Fútbol Club en cualquiera de las eliminatorias que disputará de la Champions League, pero eso si, desea seguir retransmitiendo la salida de la Hermandad de la Macarena en la Madrugá sevillana.

En una fria mañana de diciembre nos encontramos dos jóvenes periodistas alcalareños con nuestro paisano José Antonio Sánchez Araujo en los estudios de la emisora local de Alcalá de Guadaíra, Radio Guadaíra. Una mesa y dos sillas en la habitación que sirve como entrada a los estudios hace las veces de improvisada oficina en el que comenzamos sin demasiados preámbulos, ninguno podríamos decir, él pide que comencemos a preguntar mientras todavía se quita el abirgo y está acomodándose en la silla, no hay tiempo que perder, aquí comenzamos la entrevista al periodista con la mayor cantidad de partidos de fútbol retransmitidos en España. Primero queremos hacer un breve repaso por sus inicios y su carrera como profesional de la información, a la vez que también lo invitamos a comparar el periodismo de antaño y el periodismo actual. Comienza contando que realmente en aquellos años en los que él comenzo, la década de los 50, se comenzaba en el periodismo por hobby, como a él le pasó, en unos años en los que existían pocos licenciados en el Periodismo en toda España, pero especialmente en Andalucía, él empezó en la profresión gracias a la afición que tenía por la radio, y atraído también por la retransmisión de partidos de fútbol que se hacían en aquella pequeña emisora alcalareña en la que comenzó, la Emisora Parroquial Nuestra Señora del Águila. Ha simultaneado durante toda su carrera la radio y la prensa escrita, colaborando en diarios como: Pueblo, Suroeste, Diario16, Abc, Hoja del Lunes o El Correo, basando toda su trayectora profesional en la crónica deportiva. Pese a llegar a donde ha llegado afirma dejar a un lado todos los premios y todos los reconocimientos que ha recibido a lo largo de su trayectoria, especialmente en estos últimos años de su carrera -como la Medalla de Oro al Trabajo concedida por el Gobierno en el año 2004 como reconocimiento a su larga trayectoria periodística-, galardones que no han sido pocos, pero de los cuales él no presume, hecho que nos llegó a demostrar en varias ocasiones a lo largo del encuentro mientras iba contestando a varias de las preguntas que le hicimos sobre estos reconocimientos especiales, premios o distinciones que ha tenido, Araujo dice no querer hablar de sus reconocimientos en primera persona, y prefiere que de él hablen otros. Esta misma honestidad nos la vuelve a demostrar a la hora de preguntarle por su apodo de «El Maestro»: “a mí no me gusta nada, yo soy una persona normal y corriente con mis nombres y apellidos, pero bueno, si lo dicen bajo el efecto del cariño se puede llegar a admitir”. También ha llegado a crear escuela en la forma de retransmitir los partidos, con su “Narrativa Araujo”, pero no está de acuerdo en que sea algo especial, simplemente considera que se le denominó así por la necesidad existente de publicitar las retransmisiones deportivas llamándolas con un nombre distinto a las demás, había que diferenciarlas, pero que para él realmente sólo es una forma personal de narrar los partidos.

Es consciente de la evolución del periodismo que él mismo ha ido viviendo, haciéndonos especial hincapié en la cantidad de estudiantes que surgen año tras año y que hoy día pueblan las redacciones de los medios en busca de un hueco, cantidad de periodistas que antiguamente no existía. Realmente José Antonio no nos muestra un futuro demasiado favorable para los estudiantes en su respuesta, en la cual también nos dice qué cambiaría del periodismo actual: “el cambio ha sido a peor, antes el periodismo era más bonito que hoy. En mi época ibas con una libreta y un bolígrafo a una entrevista, era también un periodismo de más de investigación. Del periodismo de hoy día eliminaría lo mal que lo pasa la gente joven, sobre todo los becarios que veo año tras año, y que los ves preparadísimos y enamorados de la profesión, pero que después no acceden a la profesión en su mayoría”. Para este problema de la poca oportunidad que tienen los estudiantes que año tras año salen licenciados propone una regulación de la profesión: “yo regularía la profesión según los puestos de trabajo que se necesiten, intentaría ajustar la necesidad con los periodistas que salen, ya que hoy día al final están todos los jóvenes trabajando en una Consejería o en una empresa y ahí el periodista hace de todo menos lo que ha estudiado, porque ahí no puede ejercer y desarrollar todo lo que pensaba hacer al estudiar, en estos lugares te dicen qué información debes ofrecer, y realmente no van a conocer esta profesión”. Entre el periodismo deportivo que él hacía y el que se hace actualmente no ve grandes diferencias, excepto a la hora de elaborar las crónicas, las formas reconoce que son las mismas, dice que exclusivamente han cambiado los medios con los que se elabora, la rapidez que hoy día se consigue gracias a los avances tecnológicos y la parte técnica con la que se prepara la información. Pero la base de la crónica, la forma de redactarla o decirla sigue haciéndose de un modo muy parecido que cuando él comenzó.

Hay una pregunta que a muchos estudiantes de periodismo nos gusta elaborar cada vez que nos encontramos con un profesional de los medios. A los periodistas universitarios nos gusta saber si los grandes profesionales ven útil la enseñanza y preparación que recibimos entre las cuatro paredes de la facultad, si todo se aprende con teorías y pocas prácticas reales, y ante esta pregunta Araujo se muestra implacable: “esta profesión no tiene nada que ver lo que te enseñan en la facultad con lo que después haces en la calle, decir lo contrario es una auténtica falacia. La profesión periodística se aprende realmente en la calle, a mi los becarios me decían cuando hablaba con ellos en la redacción que estaban haciendo cosas con nosotros que no le habían enseñado en la universidad, que en tres meses habían aprendiendo cosas verdaderamente útiles que en la facultad no habían aprendido” y concluye: “lo que enseñan en las universidades está muy lejos de la realidad que después ejerces cuando trabajas en la calle al pie de la información y la noticia”.

Un momento de tensión que notamos los dos estudiantes surge cuando preguntamos por el rumor que rondaba por los medios sevillanos sobre la oferta que José María del Nido le había ofrecido al periodista para trabajar en la radio oficial del Sevilla Fútbol Club, Araujo nos remite a preguntarle directamente a Del Nido, nos deja entrever una falta de acuerdo cuyo resultado final no es publicable. El periodista apela a la elegancia que siempre se debe mantener, y pese a que parece ser que la pregunta no le ha gustado, al finalizar la entrevista confiesa que le ha gustado que se le pregunte por el tema, pese a que no pueda contestar, le gusta que hayamos indagado sobre el rumor y que tuviéramos la necesidad de confirmarlo. Reconoce que no todo deben ser preguntas fáciles para el entrevistado, siendo ese tipo de preguntas las de los buenos periodistas, y parece ser que en el fondo se alegra de que los dos estudiantes no se lo vayamos a poner tan fácil. Es en este momento cuando respiramos tranquilos y sabemos que no existe el malestar que habíamos notado en primera instancia.

Cambiamos un poco de tema y nos interesamos por los momentos con los que se queda de su carrera, los partidos que recuerda especialmente, momentos tanto buenos como malos. De los buenos, dice que de todos los partidos que ha narrado tenía quedarse con las grandes finales: las dos UEFA del Sevilla Fútbol Club (Glasgow e Eindhoven), las Supercopas de España y Europa conquistadas también por el Sevilla (Real Madrid y Barça respectivamente) o la Copa del Rey lograda por el Real Betis Balompié ante el Osasuna de Pamplona en el Vicente Calderón. Dice quedarse con estos partidos, porque como todos en esta vida, realmente uno se queda con los momentos buenos, con las alegrías, con los ganadores, los perdedores no son recordados y explica: “las finales dicen que no son para jugarlas, sino para ganarlas, y todo el mundo recordará después que el Sevilla ganó su segunda UEFA en Glasgow, pero nadie se acuerda que el equipo que perdió aquella final fue en Espanyol de Barcelona, el mundo capitalista es un mundo únicamente de ganadores”.

Por el contrario desearía olvidar malos momentos como el de la muerte del futbolista Antonio Puerta, cuya noticia llegó a la concentración del Sevilla Fútbol Club en Atenas estando él mismo allí para retransmitir el encuentro del día siguiente frente al AEK de Atenas. También recuerda con sabor amargo un partido en el que el Sevilla Fútbol Club perdió en Lisboa, encuentro en el que el entrenador local, el que fuera vecino alcalareño Antonio Olivera, le hizo un mal gesto al celebrar un gol en el descuento marcado en propia puerta por un defensa sevillista.

Y también nos interesamos por su imparcialidad, con los dos equipos de la ciudad, hispalense: el Real Betis Balompié y el Sevilla Fútbol Club, ante los cuales él se declara totalmente objetivo, asegura que ante los micrófonos los dos equipos son exactamente igual, a la hora de dirigirse al público ambos conjuntos tienen que tratarse del mismo modo, pero lógicamente nos afirma que fuera de los micrófonos todos podemos tener nuestro equipo y sentir nuestros colores sin que eso afecte a posteriori en la narración. Realmente está en lo cierto, no hemos conseguido encontrar a un sólo bético que se queje de una falta de objetividad en la narración de los partidos, por muy sevillista que pueda ser.

A nosotros, como jóvenes estudiantes y como futuros profesionales de la información, nos interesaba sonsacarle alguna regla de oro, alguna pauta, que haya seguido durante su trayectoria para estar siempre en la cima del periodismo deportivo nacional, pregunta ante la que él responde negativa y sinceramente: “regla de oro no he seguido ninguna, lo único que tienes que hacer para ser bueno es hacerlo todo con muchísima dedicación, mucho cariño y amar a tu profesión. Pero claro realmente esto es difícil, y ahora cuando uno anda por su pueblo y es el locutor que más partidos ha narrado en la radio española, pues te llena el interior y te sientes orgulloso, no porque lleves un cartel que lo ponga, si no porque es algo que te llena de orgullo. Realmente será difícil que alguien me supere, no lo digo por petulancia, si no por las circunstancias actuales, porque nadie con la forma de retransmisión actual va a narrar hasta tres partidos semanales de dos equipos distintos durante más de los 44 años, que son los que yo he estado retransmitiendo los partidos del Betis y del Sevilla, viajando domingo, miércoles y domingo siempre con alguno de los dos conjuntos para narrar sus ecuentros como visitantes. Eso en la actualidad es impensable que lo haga un periodista.”.

Y después del repaso a su carrera como periodista deportivo, repaso muy breve para nada acorde con la larga extensión de su trayectoria, decidimos cambiar totalmente de registro ya que conocíamos que «El Maestro» no había retransmitido única y excluvisamente partidos de fútbol a lo largo de su trayectoria. En Semana Santa el alcalareño ha instaurado una tradición en el mundo radiofónico cofrade al retransmitir la salida de la Hermandad de la Macarena en la Madrugá del Viernes Santo, y él nos dice: “es como una tradición, cuando yo llego allí a la puerta de la Basílica el Jueves Santo ya está mi sitio guardado, y si alguien se pone le dicen que se quite que es el sitio de Araujo, y parece que al igual que tienen que estar la cruz de guía y los faroles también tengo que estar yo. Además, que parece que para los nazarenos es una tradición saludarme, me saludan los 3000 que salen por la puerta, ¡y yo ni los conozco!”, y si en el mundo del fútbol se le ve más decidido en su retirada de los micrófonos, parece ser que en esta tradición con la Hermandad de la Macarena se lo piensa con el corazón y confiesa que volverá siempre que se lo pidan, el es consciente de la tradición creada y quiere seguir mientras pueda con ella.

A raíz de esta pregunta le preguntamos por sus vivencias particulares durante la Madrugá al saber que sus imágenes, Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima del Socorro de Alcalá, están en ese mismo momento en la calles de Alcalá haciendo la Estación de Penitencia hasta la Ermita de San Roque, mientras él está trabajando y retransmitiendo otras imágenes, Pero nos contesta que siempre volvía a tiempo para ver a su Hermandad en algún punto de su recorrido durante la estación de penitencia, aunque desde que sólo retransmite la salida de la Macarena puede disfrutar más de su Hermandad al llegar antes a Alcalá. Aún así nosotros hacemos hincapié en que todo merecerá la pena sabiendo que está retransmitiendo un momento en la calle en el que muchísimas personas que no pueden salir de casa por distintos motivos están en sus hogares escuchando emocionadas. Él reconoce que pese a que el periodista no debe emocionarse para poder transmitir y comunicar bien lo que está sintiendo, también puede ser bueno emocionarse en determinados momentos porque así el oyente que está en sentirá aún más lo que está sucediendo en ese momento delante del paso en la calle.

El periodismo es una profesión bellísima en la que se viven momentos muy buenos y otros muy malos
Otro hecho importante e histórico que ha llevado a cabo Sánchez Araujo en el periodismo sevillano, y que fue todo un hito para las retransmisiones cofradieras fue protagonizar la primera narración con un micrófono inalámbrico una procesión de Semana Santa en directo, concretamente el paso de la Esperanza de Triana por la Plaza de la Campana, no limitándose a acompañar el paso de palio, sino que metió el micrófono bajo los faldones, junto a los costaleros, y estuvo retransmitiendo en directo para toda España lo que se sintió y vivió debajo de la Esperanza de Triana durante toda una chicotá que había comenzado en la tradicional petalada de la calle O’Donnel. Este es un hecho que también le llena de orgullo, ser pionero en algo que como después veremos ha creado escuela debe ser importante. Dice que realmente fue algo que surgió, sin premeditarlo, el capataz levantó el faldón y él metió el micrófono bajo las trabajaderas del paso de palio trianero y así comenzó aquella mágica narración.

Esta labor de retransmitir la Semana Santa a través de los micrófonos inalámbricos la hace actualmente de una forma exponencial Canal Sur Radio con el programa El Llamador, programa ante el que Araujo se quita el sombrero, tachando de ser una labor realmente enconmiable y de otro universo la que hacen, al conseguir tener hasta 50 líneas retransmitiendo desde diversos puntos de Sevilla, desde las salidas o entradas de los templos, pasos por carrera oficial o los pasos por la Catedral, él termina comparando esta labor que se hace actualmente con aquellas Madrugás en las que sólo había un medio retransmitiendo en directo y desde un único punto, los Palcos de la Carrera Oficial, lo que acontecía en las calles sevillanas durante la mágica semana.

Y el último cambio de tercio, no podíamos dejar pasar la oportunidad de hablar con el que algunos han considerado el mejor embajador de Alcalá en el extranjero, él siempre ha hecho gala de su alcalareñismo, pero no más allá de el simple hecho de ser de Alcalá. Dice que es de Alcalá al igual que pudo ser de cualquier ciudad norteamericana, vivir en la Sexta Avenida y trabajar en el Times, peroque nació en Alcalá, decidió vivir en Alcalá y aquí quiere acabar sus días. Pero -y de nuevo sale a relucir la naturalidad- que no es más que ningún otro alcalareño. Fue pregonero de su Semana Santa en un año en el que el Consejo de Hermandades y Cofradías de Alcalá quiso renovar los aíres y darle ciertos tintes de grandeza después de varios ediciones en decadencia. Y vaya s i lo consiguió, Araujo llenó el Teatro Gutiérrez de Alba, e incluso muchos se quedaron sin poder escucharlo en directo en una butaca, y pese a que en principio rechazó el ofrecimiento de anunciar la Semana Mayor de su pueblo, finalmente cuando lo hizo dice que se sintió más que a gusto, y deseó que el momento durara otra hora más. Pero después de esto, y de dar dos pregones más, uno de ellos la Exaltación de la Saeta en la Catedral de Sevilla a petición del que entonces fuera Cardenal, Monseñor Amigo Vallejo, Araujo afirma no querer dar más pregones, porque él no es de esas personas que se dedican a darlos, teniendo un pregón robot que después modificar según la temática, cuando él ha hecho un pregón lo ha hecho buscando algo nuevo y diferente que consiguiera emocionar al público.

Sobre su distinción como Hijo Predilecto de la Ciudad dice no sentirse diferente a ningún otro alcalareño, y seguir incansable en su buen hacer como ciudadano, sin mirar más allá de premios o reconocimientos, que según él, a veces se hacen por mero compromiso con el galardonado.

Realmente él se siente querido en su ciudad, no son pocos los vecinos de Alcalá que en cualquiera de sus calles cuando él va paseando le paran para saludarle afectuosamente, en Alcalá todos se sienten orgullosos de tener un vecino como Araujo.

Para redondear la entrevista queríamos lanzarle dos preguntas definitivas: la dificultad que estaba teniendo para abandonar definitivamente los micrófonos deportivos, si era duro abandonar la profesión después de tantos años, y como no, queríamos pedirle un consejo para los jóvenes periodistas.

En su respuesta a la primera cuestión volvió a mostrarse rotundo y sincero: “no echo de menos las retransmisiones. Desde que me retiré el 15 de agosto en la final del Trofeo Carranza de Cádiz, partido en cuyo descanso la Alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez me hizo entrega de una placa conmemorativa, y fue curiosamente el primer partido de mi vida en el que me ausenté de la cabina al comienzo de la segunda parte, desde entonces no he vuelto a una retransmisión de fútbol, y aunque parezca mentira no las echo de menos. Únicamente hice una colaboración en un partdo de Champions League de la fase del grupos del Sevilla Fútbol Club por un favor que le debía a Paco Gamero, de Canal Sur Televisión, y por ahora no me planteo volver. Quiero vivir mi vida, sereno, con mis cuatro o cinco cosas que hacer porque realmente me gustan, como esta entrevista o las colaboraciones con Radio Guadaíra, pero volver no. Pero de todas maneras, si vuelve a entrarme el mono, siempre podré volver, ¿no?. Lo que si es cierto es que me gustaría poder retransmitir un último partido importante del Sevilla Fútbol Club, en alguna eliminatoria de Champions League o similar”.

Sobre el consejo que nos pudiera dar nos puso en sobreaviso “el periodismo es una profesión realmente bonita, que hay que vivirla y amarla, en la que te encontrarás y vivirás momentos muy malos y momentos muy buenos. Yaunque vivas momentos malos, si sabes que los vives porque a alguien no le ha gustado que informes de la verdad, realmente tú estarás orgulloso por decir siempre lo que debes. Y tampoco es una profesión que se cobre todo lo que se hace, no es una profesión en la que el salario esté acorde a la importancia que realmente tiene lo que has hecho, como por ejemplo pueda ser una entrevista al Presidente de la Junta, José Antonio Griñán, o a un futbolista o a un presidente de un club de fútbol para cualquier medio. Esa importancia no está pagada. Pero si te sientes completamente satisfecho cuando eres capaz de sacar toda la fuerza de tí mismo para elaborar y publicar una noticia que has encontrado tú, un reportaje de investigación elaborado por tí, y saber que estás diciendo la verdad y que por ella estás luchando. Es por este motivo, por el placer del trabajo bien hecho es por el cual el periodismo es una de las profesiones más bonitas que existe. Pero también es cierto que está inmerso en una realidad laboral con pocas oportunidades para los jóvenes periodistas, y si el mundo laboral en general está mal, el del periodista está peor”.

Con esta rotunda afirmación acabamos nuestra rueda de preguntas, ha pasado cerca de una hora, un encuentro que comenzó con prisas ha acabado en un inmejorable ambiente, los dos periodistas estamos orgullosos de poder haber asistido a una magistral exposición de la vida de todo un Maestro, pese a que a él no le guste el apelativo, pero sus consejos nos serán muy útil desde ese mismo instante.

1 comentario:

betteni dijo...

mi opinión es muy valorada sobre este señor